¡Nos vamos de vacaciones!
Los acuariófilos también tenemos derecho a disfrutar de nuestras merecidas vacaciones. Tenemos ganas de viajar, de desconectar de la rutina diaria, de descubrir nuevas culturas viajando a otros países y el acuario no tiene por qué ser un impedimento.
Antes de nuestra marcha, igual que hacemos los preparativos de nuestras vacaciones, también tenemos que tomar las respectivas precauciones con nuestro acuario. Sería una auténtica lastima que, después de estar todo un año trabajando para mantener en las mejores condiciones nuestro acuario, por no tomar las correspondientes precauciones, se fuera todo al garete en nuestra ausencia.
Por otro lado, tengamos en cuenta que un acuario es mucho menos problemático durante las vacaciones que la mayoría de animales utilizados como mascota, de modo que todo es mucho más sencillo.
El presente artículo resume en una serie de puntos las cosas que debemos tener en cuenta antes de nuestra marcha para que tanto nosotros como nuestros peces podamos disfrutar de las vacaciones.
1. Programador de luz.
Es un elemento altamente recomendable incluso cuando estamos en casa, ya que controla de forma automática el apagado y encendido de las luces de nuestro acuario. Tiene la ventaja que permite que la duración del día sea la misma todos los días y que siempre amanezca a la misma hora y anochezca del mismo modo. Queramos o no, si realizamos nosotros estas labores, algún día nos despistaremos y dejaremos encendidas las luces toda la noche o no nos acordaremos de darle al botón cuando vamos a trabajar a primera hora de la mañana medio dormidos.
Cuando marchamos de vacaciones, suelen haber dos posibilidades: dejar las luces permanentemente encendidas o apagarlas. Ninguna de las dos opciones es buena, lo mejor es que peces y plantas, en nuestra ausencia, puedan continuar con el mismo fotoperiodo que tenían cuando nosotros estábamos en casa.
Tengamos presente que la mayoría de peces que mantenemos en nuestro acuario son diurnos y que necesitan luz para comer. Por tanto, de nada sirve dejarles un comedero automático, si la habitación donde se encuentra el acuario está a oscuras y el acuario tiene las luces apagadas durante nuestra ausencia. Pensemos también que las plantas necesitan la luz para realizar la fotosíntesis y sobrevivir, de modo que sería conveniente que respetáramos el fotoperiodo.
2. Alimentación.
Los peces no son animales a los que se les pueda dejar un montón de comida dentro del acuario a la cual puedan acudir para alimentarse durante nuestra ausencia. Por las propias características del medio físico en el que viven, el agua, la comida depositada de este modo se pudrirá y descompondrá contaminando el medio, y lo peor de todo es que sólo una pequeñísima parte (y eso durante los primeros minutos) será aprovechada por nuestros peces.
Viendo que la solución no es llenar el acuario de comida...¿cómo alimentamos a nuestros peces? Existen diferentes alternativas y os las comentamos brevemente.
- Amigo o familiar à Los acuariófilos noveles y los no acuariófilos tienden a sobrealimentar a los peces. De modo que os recomendamos que, en caso de dejar a alguien al cargo de vuestro acuario, le dejéis las raciones de comida en sobres y que cada vez sólo tenga que vaciar un sobre dentro del acuario. De no hacerlo así, a vuestra vuelta podéis tener un disgusto.
- Pastillas de calcio à Es la solución más económica que existe en el mercado, pero también es la de peor calidad. Las pastillas tienen una duración (generalmente pocos días o a lo sumo dos semanas) que marca el fabricante en el envoltorio, pero dependiendo de la calidad del agua de nuestro acuario (si es más o menos ácida), las pastillas se disolverán más rápido o más lentamente.
- Alimento comprimido à Una mejor opción que la anterior, aunque sólo válida si nos ausentamos de casa como máximo 15 días. No influye la calidad del agua en la liberación de la comida.
- Comedero automático à Es la mejor solución. Colocando unas pilas de calidad, os podréis ausentar durante periodos superiores a un mes si se diera el caso y vuestros peces estarían alimentados como si estuviérais en casa. Os recomendamos que lo compréis unos días antes de vuestra marcha para poder familiarizaros con él y ver cómo funciona.
- Ayuno à A excepción de los alevines, los peces adultos que han sido bien alimentados durante el resto del año, podrán aguantar sin comer hasta nuestro regreso. Claro está, nuestra ausencia no debería ser excesivamente prolongada. Como límite, nosotros diríamos que ausencias superiores a una semana requerirían del suministro de algún tipo de alimento.
La moraleja que tenéis que sacar es que las ausencias de fin de semana no son problemáticas y los peces pueden ayunar sin problemas. Que si os decidís por el suministro de algún tipo de comida de larga duración, debéis poner como prioridad la calidad de ésta. Ya sabéis que un acuariófilo más que cuidar a sus peces tiene que cuidar al agua de su acuario, por tanto, no podemos permitirnos dejar un alimento de mala calidad que más que alimentar a nuestros veces nos contamine el agua. Sin duda, para evitarnos todos estos problemas, la mejor solución es instalar un comedero automático que incluso puede alimentar a nuestros peces cuando estemos en casa.
3. Labores de limpieza.
Sería conveniente que antes de marchar, realizarais en los días previos un cambio parcial de agua y que la semana antes de vuestra marcha, limpiarais el filtro. Así, garantizaréis que los peces quedan en las mejores condiciones ambientales y que el acuario no está cargado excesivamente de materia orgánica.
4. Introducción de peces nuevos, plantas, etc...
No es recomendable introducir ningún habitante a nuestro acuario las semanas antes de vacaciones. Sería fatal que se desarrollara alguna enfermedad durante nuestra ausencia. Esto no sólo afecta a los peces, sino también a las plantas e incluso, a la decoración inerte. Evitemos riesgos.
5. Temperatura.
Durante el verano, nuestro acuario tiende a alcanzar temperaturas realmente altas que afectan negativamente a los habitantes de éste. Este problema lo tenemos incluso cuando estamos en casa, pero claro, cuando marchamos al dejar todas las puertas y ventanas cerradas por seguridad, nos arriesgamos a que los efectos sean todavía más catastróficos.
La solución más efectiva, aunque cara, es colocar un enfriador. De todos modos, podemos conseguir bajar hasta 5 ºC, colocando unos ventiladores de ordenador en las tapas o bien, la opción comercial basada en el mismo sistema.
Aunque los termocalentadores de precisión no suelen dar problemas, no está de más que los saquemos del acuario.
6. Aireación.
El agua caliente contiene menos oxígeno que el agua fría. Por tanto, sería conveniente que durante los meses estivales (y más en nuestra ausencia), aseguráramos la oxigenación del agua de nuestro acuario por medio de un compresor de aire.
7. Evaporación de agua.
Durante el verano, se evapora muchísima agua, pero esta agua es pura y las sales quedan en el acuario. Esto quiere decir que debemos rellenar nuestro acuario con agua destilada (especial para acuarios) o agua de osmosis, pero nunca con agua de grifo (salvo que ésta se blanda) o aumentaríamos la mineralización.
Algunos aficionados idean sistemas con bombas y boyas para rellenar automáticamente su acuario con agua de osmosis. En caso de estar interesados, sabed que el sistema existe y que tan sólo tenéis que acudir a vuestro comercio de confianza para informaros.
Llegado a este punto, tan sólo nos queda desearos unas felices vacaciones. Esperamos que la información que aquí os hemos brindado os sea de utilidad y podáis disfrutar de vuestro descanso sin pensar en vuestro acuario.
¡FELICES VACACIONES!
|